Soy Susana Pereira. Creé este espacio para llevar a cabo el compromiso que asumí al terminar un diplomado en Tanatología: Acompañar y difundir herramientas que puedan ayudar a quienes estén atravesando un proceso de duelo. Primeramente les voy a comentar qué es la Tanatología, una disciplina casi desconocida en nuestro país. Etimológicamente deriva del griego antiguo Thanatos, muerte; y logos, tratado. Pero no es solo un tratado sobre la muerte.
La Tanatología, en mi experiencia, trata sobre la vida. De cómo vivirla con responsabilidad después de haber tenido una pérdida. Porque sobre la muerte ya no hay mucho de qué hablar ni hacer, ya que la misma es irreversible y absoluta. En cambio, la vida tiene un montón de acepciones. Se trataría de cómo vivir la vida a pesar del dolor y como honrar la memoria de quien ya no está.
La pionera en esta rama es la Dra. Elizabeth Kubler Ross, psiquiatra, quien tuvo que sortear varios obstáculos para poder estudiar y analizar qué pasa en el proceso de la muerte. Trabajó incansablemente en el área de enfermos terminales, donde ayudó tanto a pacientes como a sus familiares.
La Tanatología es un acompañamiento en el recorrido del duelo, que es un camino que indefectiblemente debe ser transitado. Este acompañamiento, si bien es breve, es intenso. Se aplica a todos los procesos de duelo, no solo la muerte de un ser querido. Toda situación que cause dolor a raíz de una pérdida. De ninguna manera se trata de suplir ni de igualar a unaterapia psicológica. Yo no soy psicóloga ni pretendo serlo, soy alguien que puede escuchar, y contar como transité mi duelo y por todo lo que pasé hasta llegar a la aceptación.
La Tanatología fue para mí un salvavidas al cual me aferré y hoy puedo decir que a pesar de lo que pasó puedo ser feliz. Digo a pesar de lo que pasó porque creo que tuve una de las pérdidas más significativas y dolorosas que puede sufrir un ser humano. Hace dos años murió mi hija menor, de tan solo dos años y medio, Darinka. Desde el día de su muerte estaba convencida de que no iba a sobrevivir a su ausencia, sin poder percibirla con mis sentidos. Era como tener una herida gigante en carne viva en el pecho que dolía absolutamente todo.
Fueron noches realmente oscuras de desvelos y días largos sin sol. Fue extremadamente doloroso, no solo para mí, sino también para toda mi familia. Pues esa niña que llenaba nuestra casa de colores y luz ya no estaba. Fue como vivir un naufragio en un mar tempestuoso donde el ahogamiento era inminente. Este duelo fue compartido por toda mi gran familia y amigos, porque Darinka no solo era hija, era hermana, sobrina, nieta, prima, etc…
Cumplió varios roles en su corta vida. Cada miembro de la familia transitó este proceso de forma diferente. Porque como cada persona es distinta, vive el duelo a su manera. “El duelo es como un traje a medida”. Pero aun así este camino fue recorrido con el apoyo y el acompañamiento de todos.
Un día recibí un vídeo donde una tanatóloga, Gaby Pérez Islas, explicaba uno de los temas que replicaba en mi cabeza: “¿Por qué a la gente buena le pasan cosas malas?”. Y su explicación breve, pero precisa, me ayudó a comprender que la vida no se trata de premios ni castigos. En la vida ocurren cosas que pueden ser buenas o malas y que no anda eligiendo a los buenos o malos para que les suceda una u otra de las situaciones. Desde ese día me interesé en saber más sobre la Tanatología y fue así que llegué hasta un diplomado impartido, justamente, por Gaby Pérez Islas. Era lo que necesitaba para hacer un verdadero cierre a mi duelo. A partir de ahí entendí que pude reconstruir una mejor versión de mi persona: Alguien empática dispuesta a escuchar sin juzgar, y contar su testimonio de vida. Que a pesar de lo ocurrido uno puede elegir ser feliz y vivir honrando la memoria de quien hoy habita en nuestro corazón.
A través de este espacio, estaré compartiendo también materiales valiosos durante este trayecto. Espero puedan sumarse a este plan, y que encuentren lo que yo encontré en su momento, paz.
Aquí estamos para aprender algo nuevo. Te felicito por la entereza de emprender un camino que atraviesa senderos que, muchos, no se atreverían a hacerlo. Abrazos.
Me alegro que se sume a esta travesía! Muchas gracias! esta entereza la encontré justamente después de mi recorrido por el duelo, cuesta y mucho, pero es la única forma de poder seguir adelante con el bien más preciado que justamente perdió Dari, que es la vida. En memoria de ella y del amor que me tenía, hago esto, esperando que el bien se multiplique. Las publicaciones no serán tan seguidas, pues espero que la gente pueda interactuar, además tengo que esperar la revisión y correción de quienes me ayudan en esto. La verdad estoy entusiasmada, y encuentro satisfacción de poder contar nuestra historia ya sin dolor, ni tristeza, solo nostalgía de Dari. Un abrazo fuerte
Tu historia querida Susana es verdaderamente inspiradora y llena de amor. Gracias por compartirla y hacernos parte de ella
Muchas gracias Ada querida, espero poder ayudar desde mi experiencia a quienes esten atravesando ese duro momento. Abrí este espacio íntimo para quién lo necesite. Gracias a vos por acompañarme en este viaje que es la vida. Un abrazo
Mi amor, me hace muy feliz verte florecer.
Te amo
Con el solo hecho de ver como te superas día a día ya estás ayudando a muchos como yo, que a veces no logramos entender. Sos un ejemplo para muchas personas. Te admiro por cómo encaras la vida luego de la pérdida de Darin y como te desborda el amor y las ganas de seguir ayudando a los demás.
Gracias mi corazón!!, y aprendí que hay cosas que tal vez nunca vamos a entender, solo sentir. Por eso está pagina se llama como mi Dari, porque ella me enseñó que puedo seguir amando sin percibir con mis sentidos, que puedo ser feliz a pesar de… y no porque tengo todo. Amo lo que tengo. Y si puedo enseñar por medio de mi experiencia, ya me doy por satisfecha o si puedo ser compañía y una oreja a quien lo necesita, se que estoy cumpliendo con el compromiso que asumí al aprender a resignificar la muerte de Dari. Sabes que estoy aquí siempre. Un abrazo
Perdí a mi hija de la misma edad de Dari ahace 20 días… Ella se ahogó en la piscina de casa. Una amiga me pasó tu página de Instagram y me dijo que hasta inclusive puedo escribirte., Y acá estoy escribiendo. Espero que, tengo fe que tú página me ayudará mucho
GRACIAS querida Susana
Querida Mariell, aquí estoy, para vos, no solo en mis palabras, sino en persona. Mi corazón de madre te abraza fuerte, quiero que tengas la certeza de que no estas sola y que si bien el dolor es insoportable, se puede seguir sostenida en la fe en una misma, en el amor de nuestras hijas, y en la esperanza del reencuentro. Si necesitas hablar, o incluso solo queres expresarte por medio de la escritura, podes escribirme. Te pido que te cuides, que alimentandote bien, se que no tenes ganas seguro, pero es muy importante, que te alimentes y te hidrates, si podes hace algún ejercicio, salir a caminar, algún hobie que te guste, un buen libro, yo te recomendaría el camino de las lagrimas del Dr. Bucay, rodearte de las personas que amas y te aman, tener una red de apoyo, de hecho yo ya formo parte de tu red. Te reitero que espero que te cuides en cuerpo, cabeza y alma. Este camino parece no tener fin, pero tiene, tene paciencia y se amable contigo misma, acordate que sos la persona que más amó tu pequeña. Esa siempre fue mi fuerza, saber que fui y soy la persona que más amó Dari. Con mi corazón reconstruido deseo que pronto puedas reconstruir el tuyo. Te abrzo fuerte